En la Casona de Tudanca, esa grande y blanca que vemos en el centro del pueblo, pasaba grandes temporadas Jose María de Cossío, herencia de su familia. De ahí que se le llame también la Casona de Cossío. Por allí pasaron grandes personajes también, como Unamuno, Rafael Alberti, e incluso, Francisco Giner de los Ríos.
En el 75, Cossío cedió la Casona y sus pertenencias a la Diputación de Santander. Hoy en día alberga un museo y una biblioteca, llena de obras y manuscritos de diferentes escritores con gran valor tanto histórico como de calidad.
Tudanca además es Conjunto Histórico por su riqueza arquitectónica.
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